El conjunto residencial consta de un nivel bajo rasante, con uso de garaje y trasteros, planta baja destinada a viviendas, zonas comunes y piscina, con 2 plantas sobre rasante más ático y cubierta, dedicado a uso residencial.

La estructura se resuelve mediante forjados de losas macizas de hormigón armado y unidireccionales con pilares de hormigón en todas las plantas del edificio y núcleos de ascensor.

Dadas las dimensiones del edificio, se plantean juntas de dilatación dividiendo la estructura en tres cuerpos con longitudes de forjado inferiores a 40 metros.

La contención, en general, se ha resuelto por medio de muros de sótano y muros de urbanización convencionales con zapatas corridas superficiales o sobre pozos. La cimentación se resuelve mediante zapatas o zapatas sobre pozos, tomando en consideración las recomendaciones del Estudio Geotécnico.